¡Muy buenas, chollistas! Qué tal estáis. Hoy vamos a hablar de algo que nos apasiona en esta comunidad: la tecnología punta, sí, pero sobre todo, la sensación de conseguirla a un precio que roza lo ridículo. Como sabéis, en este mundillo no hay mayor placer que configurar una nueva máquina sabiendo que has pagado por ella mucho menos de lo que vale. Es una victoria personal. Y hoy, amigos, os traigo lo que podría ser uno de los chollos del año.
Tienes que teclear el cupón descuento ESCD12 en tu carrito de la compra antes de pagar.
He estado probando el Mini PC GMKtec NUCBOX G10. Y antes de que empecéis a bostezar pensando que es «otro mini PC más» con un procesador de portátil, dejadme ir al grano, a lo que nos importa: cuesta 124 euros. No, no me he comido un número. Ciento veinticuatro euros. Esto es gracias a un descuento brutal de 170 euros sobre su precio original, al que sumamos el cupón ESCD12.
La pregunta es obvia y es la que vamos a responder en este análisis: ¿Dónde está el truco? ¿Estamos ante una pieza de museo obsoleta o ante una oportunidad de oro para montar un segundo PC, un servidor doméstico o una máquina de ofimática y multimedia por el precio de una cena decente?
Vamos al lío. He puesto a prueba esta pequeña caja plateada y os voy a contar, sin tapujos, para quién es esta máquina y por qué, probablemente, la necesitas.
El Corazón de la Bestia: Un Ryzen 5 que aún tiene mucho que decir
Seamos sinceros. Cuando vemos un precio de 124€, esperamos encontrarnos un procesador Intel N95 o N100. Son chips solventes para tareas básicas, pero muy limitados. Tienen pocos núcleos, pocos hilos y una gráfica integrada que sufre con solo pensar en abrir un juego.
Aquí viene la primera gran sorpresa del GMKtec G10. Esta máquina no lleva un chip de bajo consumo de la serie N. Lleva un AMD Ryzen 5 3500U.
Vale, paremos un momento. Los más veteranos del lugar sabrán que el 3500U no es un procesador de última generación. Está basado en la arquitectura Zen+, fabricado en 12 nm. Salió hace unos años. Pero aquí es donde el «cazador de chollos» ve la oportunidad que otros no ven.
Este no es un procesador de 4 núcleos y 4 hilos como los N100. Estamos hablando de 4 núcleos y 8 hilos. El doble de hilos. Esto, en el mundo real, se traduce en una multitarea mucho más fluida. Puedes tener 20 pestañas de Chrome abiertas, Spotify sonando, un documento de Word y estar descargando algo, y el G10 no se va a ahogar. La propia GMKtec estima que su rendimiento es un 35% superior al de los chips N-Series (N95/N97/N100/N150), y sinceramente, creo que se quedan cortos en tareas que aprovechan esos 8 hilos.
El procesador trabaja a una frecuencia base de 2.1 GHz, pero es capaz de escalar hasta 3.7 GHz cuando se le exige. Y lo más importante: la gráfica. Integra una Radeon Vega 8 con 8 núcleos gráficos a 1200 MHz. De nuevo, no es una RTX 4090, pero está a años luz de las gráficas integradas Intel UHD de los Celeron y Pentium. Como veremos más adelante, esta Vega 8 es la clave que convierte a este PC de «solo ofimática» a «centro de emulación y juegos ligeros».
Ahora, hablemos de la «letra pequeña» que, para nuestro público, es en realidad una ventaja. El modelo en oferta por 124 euros es Barebone. ¿Qué significa esto? Que viene sin memoria RAM y sin disco duro SSD.
Para un usuario novato, esto es un problema. Para un chollista como tú o como yo, esto es una bendición. ¿Por qué? Porque no nos obligan a pagar por componentes de baja calidad. Nos dan el chasis, la placa base, la licencia de Windows 11 Pro y el procesador. El resto, lo ponemos nosotros.
¿Tienes por ahí un módulo de 8GB de RAM DDR4 de un portátil viejo? Te sirve. ¿Un SSD M.2 NVMe que cambiaste por uno más grande? Te sirve. Esta máquina admite hasta 64 GB de memoria RAM DDR4 (aunque con 16 GB va sobrado) y un SSD M.2 2280 PCIe 3.0 de hasta 8 TB. Podemos montar un equipo de 16GB y 512GB de SSD por cuatro duros, reutilizando componentes o comprándolos en oferta. El modelo que hemos probado para las pruebas venía con 16 GB de RAM y un SSD de 512 GB, y el rendimiento ha sido francamente sorprendente.
El G10 en el Mundo Real: ¿Es Rápido o No?
Las especificaciones están muy bien, pero ¿cómo se siente el G10 en el día a día? Para eso estamos aquí.
Lo primero que haces es instalar Windows 11 Pro, que viene preinstalado y se activa solo. El proceso es rápido. El SSD que probamos, un M.2 NVMe, arrojó unas velocidades de locura para este precio: 3.600 MB/s en lectura y 2.719 MB/s en escritura. Esto significa que el sistema operativo vuela. Arranca en segundos. Abrir Photoshop es casi instantáneo. La sensación de agilidad es total.
Pasamos la prueba de rendimiento de CPU Cinebench. Obtuvo 1.789 puntos en multinúcleo y 361 puntos en un solo núcleo. ¿Qué significa esto? No es una estación de trabajo para renderizar una película de Pixar. El propio analista del vídeo de prueba comentaba que «personalmente pensaba que iba a funcionar de manera más rápida y fluida». Sin embargo, acto seguido, confirma lo que yo he sentido: para tareas cotidianas, va sobrado.
Y es que aquí está el quid de la cuestión. No podemos analizar un PC de 124€ con la misma vara de medir que uno de 800€. La pregunta es: ¿puede con el trabajo diario?
Navegación web: He llegado a tener 30 pestañas abiertas en Chrome, incluyendo vídeos de YouTube, y el PC seguía respondiendo con dignidad. Los 8 hilos del Ryzen marcan la diferencia.
Ofimática: Mover hojas de cálculo pesadas en Excel, presentaciones de PowerPoint, documentos en Word… es un paseo. Es una máquina de oficina perfecta.
Multimedia: Este es uno de sus puntos fuertes. Reproduce vídeos de YouTube en 4K sin despeinarse. Lo conectas a la tele y tienes un centro multimedia de primer nivel para Netflix, HBO, Disney+ y lo que le eches.
Edición ligera: ¿Puedes editar fotos en Photoshop? Sí. Para recortes, ajustes de color y filtros, funciona perfectamente. ¿Puedes editar un vídeo 4K con 10 pistas? No, para eso no es.
Lo que más me ha gustado es su silencio. A pesar de tener un ventilador activo con heat pipe y una placa de aluminio para disipar el calor, el PC es prácticamente inaudible en tareas ligeras. Solo cuando le exiges el máximo (como en las pruebas de estrés o jugando) el ventilador se activa, pero de forma muy contenida. Esto es mucho mejor que los diseños pasivos de los N100, que sufren throttling (bajada de rendimiento por calor) en cuanto les pides un poco más. El G10 mantiene su rendimiento de forma estable.
¿Se Puede Jugar? El Veredicto Lúdico y de Emulación
Aquí es donde la gráfica Radeon Vega 8 entra en juego. Si este PC tuviera una Intel UHD, la respuesta sería un «no» rotundo. Pero la Vega 8, aunque modesta, tiene músculo.
Pasamos el test 3DMark Night Ride, diseñado para gráficas integradas, y arrojó una puntuación de 2.641 puntos. De nuevo, no impresionará a un gamer de PC Master Race, pero nos da pistas.
El analista de la vídeo-review fue valiente y probó varios juegos:
Juegos 2D o poco demandantes: (Tipo Hollow Knight, Stardew Valley, etc.). Funcionan perfectamente.
Ultra Street Fighter 4: Un juego ya con sus años, pero que sigue siendo un referente. Funcionó a unos 30-40 FPS. «Jugable, sí, pero no de manera óptima», comentaba.
Left 4 Dead 2: Totalmente jugable. Un clásico que podrás disfrutar sin problemas.
Apex Legends: Aquí ya forzamos la máquina. Con ajustes gráficos en medio-bajo, se movía entre 30 y 40 FPS. No es lo ideal para un competitivo, pero el hecho de que pueda moverlo es ya una noticia.
La conclusión es clara: no es un Mini PC para jugar a títulos Triple A modernos. Olvídate de Cyberpunk o Starfield. Pero para juegos indie, títulos de hace unos años (la librería de la generación de PS3/Xbox 360) y juegos 2D, es perfectamente capaz.
Pero donde este PC brilla, y por lo que para mí justifica su compra solo para esto, es en la emulación.
PlayStation 1: Perfecta, incluso reescalando a 2K.
PlayStation 2: A resolución nativa, la mayoría del catálogo funciona sin problemas.
Nintendo GameCube: Rescalado a 720p, funciona a 60 FPS, aunque con algún tirón esporádico.
Nintendo Wii: Un rendimiento un poquito peor, también a 720p.
PlayStation 3: «Ni lo intentes», dijo el analista. Y tiene razón. Es injugable.
¿El resumen? Tienes en tus manos una máquina que, por 124 euros (más la RAM y SSD que tengas por casa), se convierte en una de las mejores estaciones de emulación retro que puedes comprar.
La Conectividad: La Verdadera Joya Escondida
Si el procesador Ryzen 5 era la primera sorpresa, la conectividad es el gancho definitivo. Aquí es donde GMKtec no ha escatimado NADA.
Primero, el tamaño. Es ridículamente pequeño: 114 mm x 106 mm x 42,5 mm. Es más pequeño que un sándwich. Pesa nada. Viene con un soporte VESA incluido, lo que significa que puedes atornillarlo detrás del monitor o de la tele. Desaparece. Crea un escritorio limpio, minimalista, sin torres por el suelo.
Pero vamos a los puertos, porque esto es una locura:
¡Triple Salida de Vídeo 4K! Esto es increíble. Tenemos un puerto HDMI 2.1 (capaz de 4K@60Hz), un puerto DisplayPort 1.4 (también 4K@60Hz) y un puerto USB-C con función completa (datos, carga y vídeo 4K@30Hz). Puedes montarte un setup de productividad con tres monitores con un PC que te ha costado 124 euros. Brutal.
¡Puerto Ethernet de 2.5 GbE! Esto es una característica premium. La mayoría de Mini PCs de este rango, e incluso mucho más caros, vienen con un puerto de 1 Gigabit. Tener un puerto Giga Lan (RJ45) de 2500 M es una pasada. Si tienes un NAS en casa o una conexión a internet de fibra de alta velocidad, vas a volar. Es ideal para usarlo como un pequeño servidor doméstico, un cortafuegos con Pfsense o un centro de descargas.
Puertos USB: En el frontal, tenemos dos puertos USB 3.2 Gen 1 (rápidos) y el jack de audio de 3.5mm. En la trasera, además de las salidas de vídeo, tenemos el USB-C, un puerto USB 2.0 (ideal para el ratón y teclado) y la entrada de corriente.
Conectividad inalámbrica: Cuenta con WiFi 5 y Bluetooth 5.0. No es el último estándar WiFi 6, pero seamos realistas, por este precio es más que suficiente y funciona a la perfección.
La prueba de velocidad por cable LAN del vídeo fue concluyente: con una conexión de 600 Megas, obtuvo 605 Megas de bajada y 599 de subida. Satura la línea sin esfuerzo.
El Veredicto Final: ¿Es el Chollo Definitivo?
Después de analizarlo a fondo, mi respuesta es un sí rotundo. Pero es un sí con matices, un sí para el comprador inteligente.
¡Una compra maestra!
Por 124€ con el cupón ESCD12, el GMKtec G10 es un chollo imbatible. Su Ryzen 5 supera a los N100, y ofrece triple pantalla 4K y red 2.5GbE. Si buscas un barebone potente para ofimática, multimedia o emulación y te gusta ahorrar, es una compra maestra.
Editor
Chollistas.com
No es un PC para todo el mundo. Si quieres jugar a lo último en Ultra, este no es tu PC. Si necesitas editar vídeo 8K, tampoco.
Pero si eres como yo, un apasionado de la tecnología que valora el ahorro inteligente, este GMKtec G10 es una joya.
Es el PC perfecto para:
Estudiantes o teletrabajadores: Como máquina de ofimática, navegación y videollamadas, es potente, rápido y silencioso.
Amantes del cine: Conectado a la TV, es un centro multimedia 4K definitivo.
Frikis de la emulación: Es una estación de juegos retro potentísima por un precio de risa.
Manitas del cacharreo: Como servidor doméstico, servidor de Plex, Pi-hole o Pfsense, su puerto 2.5GbE y su bajo consumo lo hacen ideal.
Cualquiera que necesite un segundo PC: Para el garaje, la cocina, o para llevar de viaje.
Lo que estás comprando por 124 euros con el cupón ESCD12 (un ahorro total de 170€) no es solo un procesador decente. Estás comprando una plataforma increíblemente completa: triple salida 4K, un puerto de 2.5GbE, un chasis minúsculo con VESA, y una licencia de Windows 11 Pro.
El hecho de ser Barebone nos permite reciclar componentes y montarnos una máquina muy solvente por menos de lo que cuesta un procesador de gama media. Es, sin duda, uno de los chollos más inteligentes que he visto en mucho tiempo.
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